En el Estambul de finales del siglo XVI, el Sultán planea la elaboración de un gran libro que celebre su vida y su imperio, el cual también deberá incluir imágenes nunca antes pintadas. Dado que la ley islámica prohíbe la representación de imágenes, dicho proyecto ha de llevarse a cabo en secreto. Cuatro artistas deberán realizar el encargo del sultán al modo europeo. Cuando uno de esos miniaturistas desaparece y nacen las sospechas de asesinato, el maestro del taller deberá buscar ayuda.