He aquí una novela histórica compleja y diferente. Cuando el prólogo de un libro ya te semi enamora, es buena señal. En unas pocas páginas ambientadas en la época presente (el presente siendo 1988) se deja entrever que lo que viene va a ser una gran historia.Deborah Treverton, una joven keniata de ascendencia noble, vuelve a su país natal luego de haber dejado atrás su pasado por razones que desconocemos. Ahora sin embargo se ve obligada a reencontrarse con todo aquello de lo que escapó y hacerle frente. Y eso incluye a la mujer que echó una maldición sobre su familia.Nunca hagan enojar a una curandera africana. Secretos, intrigas, el diario de su tía Grace (que se fue a la tumba llena de más secretos) y una maldición de una mujer keniata que pesa sobre toda la familia Treverton, son los ingredientes con los que comienza Bajo el sol de Kenia.Me gusta.1919. La doctora Grace Treverton, soltera a sus 29 años y oficial de la Primera Guerra Mundial, es una mujer respetada y despreciada por igual por atreverse a hacer el trabajo de un hombre. Con el firme proyecto de construir una misión-hospital en la selva, proyecto que compartía con su prometido –desaparecido en acción–, llega a Kenia con su muy embarazada (y terca) cuñada, Lady Rose.Pero si bien el propósito de Grace es completamente altruista, no se puede decir lo mismo de su hermano, Lord Valentine Treverton. Él tiene el sueño de crear un imperio cafetero, y nada ni nadie podrá detenerlo. Es así que irá ganando terreno por encima de la tribu nativa de los kikuyu, hasta llegar a cometer el acto tabú que le valdrá el odio eterno de la respetada y temida curandera Mamá Wachera. Ella echará sobre él y toda su familia una maldición de enfermedad y desgracia, con la promesa de que durará hasta que la tierra vuelva a ser de sus verdaderos dueños: la tribu kikuyu.Será a partir de ese momento que una serie de fatalidades comenzará a azotar la vida de los Treverton, amenazando con destruir todo lo que lograron hacer hasta ahora. Creo que quien se lleva el título de protagonista principal es la maravillosa Grace Treverton. Sabemos desde la introducción que logrará su objetivo de crear una misión, pero ahora lo interesante es ver cómo lo logra, ya que al llegar a Kenia lo único que tiene como "hospital" para poder llevar a cabo «la magia del hombre blanco» son cuatro columnas y un techo de paja.Además de que ella es una mujer fuerte, tenaz, llena de compasión y con una gran personalidad, es (creo) la única que tiene contacto con todos o prácticamente todos los personajes que aparecen en algún momento aportando su punto de vista. Su historia personal es muy trágica y romántica (si bien hay poco romance en el libro), ya que aún se aferra a la esperanza de que su prometido pueda estar vivo en alguna parte y la esté buscando. Sin embargo ésto no será lo único que ocupe su mente, ya que entre la terquedad de los kikuyu, la ignorancia y las enfermedades, tiene las manos llenas.Grace tiene una extraña relación de rechazo-respeto con Mamá Wachera, joven curandera que te hace pasar del amor al odio de una página a la otra. Wachera toma como objetivo en su vida el lograr que la escencia de su comunidad kikuyu no se pierda. Para ella el hombre blanco (y especialmente Valentine) son el enemigo, sus métodos son tabú y sucumbir ante ellos es un deshonor a los antepasados. Sus capítulos son interesantes y distintos a prácticamente todo lo que he leído, ella es tan tenaz como Grace –y bastante necia por momentos–, y de alguna manera toda la historia del libro gira directa o indirectamente alrededor de ella.Muy pronto comienzan a aparecer muchos personajes muy diferentes que tienen sus momentos de protagonismo, y con el correr de los años –que a veces pasan sorprendentemente rápido– el libro se perfila como una saga familiar.Me encantaría tomarme un momento para hablar de cada uno de los personajes, pero si hago eso esta opinión va a quedar aún más extensa de lo que ya está siendo (auch)... así que simplemente voy a expresar mi admiración hacia la cantidad de matices que tienen todos los personajes. La distante y frívola Lady Rose, el crecientemente desagradable Lord Valentine, el noble y absolutamente querible Sir James... todos tienen algo que los vuelve muy únicos. Cada uno de ellos dejará su marca por sus acciones o por su falta de acción.Si bien la narración es siempre en tercera persona, los puntos de vista cambian constantemente de forma muy natural, en ningún momento confunde ni marea, y siempre sabemos en la mente de quién estamos entrando. Realmente está muy bien escrito, y a eso se suma además la manera natural en que Barbara Wood fue integrando la historia de Kenia, acercándonos con paso cada vez más firme a su independencia del Imperio Británico. Kenia es un lugar con una magia especial, se nota en las descripciones de la autora (que ha estado ahí), y me lo confirmó una amiga mía que fue dos veces a ese país. Le mostré algunos de los fragmentos más bonitos para ver qué le parecían, y asombrada me preguntó de dónde habían salido porque las descripciones eran exactas.Pero además de una ambientación muy lograda, a la historia no le falta ni una gota de realismo. Los personajes sufren de verdad y no tienen todo servido en bandeja, algunas cosas les saldrán bien al primer intento y otras requerirán superar muchos obstáculos. Y si además tenemos en cuenta que estamos viendo el pensamiento de dos grupos de personas muy diferentes, podemos incluso comenzar a tomar partido por algunos de ellos.Algo que me admiró fueron los momentos de tensión, porque son realmente muy tensionantes. Como esta novela tiene ese aire tan fiel a la realidad, en muchos momentos temí por el destino de muchos... e hice bien en temer. Algunos momentos son muy dramáticos y duelen. Fue entonces cuando noté lo sumergida que estaba en el libro. Si tuviera que criticar algo, solamente diría que hubo, cada tanto, ciertas partes que se me hicieron un poquitititito largas. Cuando el clima de revolución empieza a caldearse, algunos capítulos no me interesaron tanto, quizás porque las mentes que los dominaban eran violentas y bastante oscuras. Probablemente ésto se deba a que la novela tiene una narración objetiva e imparcial, ya que en ningún momento se demoniza a ningún personaje sino que la autora deja que nosotros saquemos nuestras propias conclusiones al verlos actuar, y al oir lo que otros personajes tienen que decir sobre ellos.Bajo el sol de Kenia es una novela atrapante. El tiempo pasa rápido y algunas cosas se resuelven de manera inesperada, mientras que otras (como cierto tapiz) se extienden de forma casi eterna, hasta llegar a conclusiones inesperadas y a un final que puede provocar sentimientos encontrados.Si les gusta la ficción histórica con un muy buen desarrollo de personajes y una ambientación diferente, exótica y bella, no se pierdan este libro.Reseña de Fantasía Mágica
I totally love Barbara Wood and her stories. If you read it you just HAVE to mention she has really been in the area she is writing about because of her visual style of writing and the details she can give about the surroundings. I've become so captivated, so fascinated I would never have layed this book aside if I would have the time for it - and even now, when I've finished it, I can't put it away because I feel almost related to it.It's real life, the life we never want to be but which is always catching up with us. The life we never want to end and on the other hand have to finish because we can't stand it any more. This one is definitely one of my favourite's (which one's not?)- thanks to Barbara Wood!
What do You think about Green City In The Sun (1991)?
Unexpectedly, this book captivated me with its sweeping descriptions of the Kenya plains and jungles, the well-researched, deep history of the country, and the rounded and real characters. The way the author explained the reasons native Kenyans hold on to their beliefs and the way that the white, European settlers hold onto theirs. The concept of home is used in a unique way, and one in which I didn't expect.The saga begins with the first Trevertons clearing land for crops and homes and for some
—L
I am about 3/4 of the way through this book and I have to say I love it!!! This is my kind of book: historical fiction, sweeping family saga. The story spans several decades set in South Africa in the beginning of the 20th century. It features strong females characters and covers the time from the end of the first world war past the second world war. It shows life from both the white, European settlers and the African tribeswomen, It is a wonderful book! I can't wait to read more from Barbara Wood.
—Jennifer
I read a French translation (title: African Lady) after much insistence by a neighbour that I would love this book and must absolutely read it.Although it wasn't as enthralling as he made it seem, it is a very interesting book which illustrates a country and a period of history most of us know nothing about, through that most universal language of all: human relations. No matter what country/culture we are from, we all have the same basic needs and can communicate on a basic level. The problems tend to arise with cultural misunderstandings, or when basic greed takes over. Both of which occur here.Took me a while to actually pick up the book and start it, but once I did I read it straight through and when I finished I was glad I'd listened to my neighbour and had read it! :o)
—Cristina